Martín Landaluce accedió a segunda ronda en el Alicante Ferrero Challenger de Villena al conseguir derrotar a Francesco Maestrelli con un 6-4, 4-6, 6-4. Alejandro Moro Cañas, por su parte, no consiguió superar este primer choque.
Cuadro ATP Challenger Alicante
Landaluce consigue el acceso a segunda ronda
Dos españoles competían a la misma hora en el Challenger de Villena en este primer día de competición dentro del cuadro principal. El joven tenista español de 17 años, Martín Landaluce consiguió eliminar al jugador transalpino Francesco Maestrelli en una tarde de mucho calor jugando al sol en todo momento habiendo superado los 30 grados centígrados.
Se encontraron con un primer parcial donde el español consiguió aprovechar la única bola de quiebre que habría y justamente fue en el primer juego de la cita. A partir de entonces, los dos jugadores con el primer golpe estuvieron enfocados. La sensación era que el español podía tener un plus más teniendo más oportunidades a la hora de restar. Fueron cuatro en el quinto juego, otras dos en el séptimo y otras cuatro en el noveno. En total 11 bolas de quiebre no aprovechadas, que en ese 4-4, le dañó muchísimo. Acto seguido, fue el transalpino quien aprovechó su opción para colocarse por delante.
Ambos se marcharon a los vestuarios y a la vuelta Martín continuó con la dinámica que estaba llevando a lo largo de la cita. Quiebre tempranero y encontrando más oportunidades. Francesco cabalgaba más irregular pero iba a llegar a estar cerca de poder equilibrar la cita pero tras forzar un deuce no fue posible. Con lo cual, a la hora de tener saque para definir, Landaluce aprovechó la segunda bola de partido ante Maestrelli en el Challenger de Villena.
Moro Cañas víctima de Marterer
El otro español que jugaba dentro de este horario era Alejandro Moro Cañas. No pudo ante un experimentado oponente como Maximiliam Marterer que sabe lo que son miles de batallas dentro de este circuito. El alemán se lo llevó con un doble 6-4. Fueron bastante igualados en cuanto a nivel con los dos queriéndose imponer desde el fondo, pero con ambos dando oportunidades al oponente. En el segundo, Moro Cañas se colocó con quiebre en el inicio del asalto cosechando buenas sensaciones, pero no encontró la suficiente constancia para acudir a la victoria del asalto.
