Rafa Nadal ha comenzado el 2018 de la misma forma que finalizó 2017: golpeado por las lesiones que le han impedido seguir cosechando títulos tan importantes y evitando que el balear compita al máximo nivel. ¿Debería Rafa Nadal reducir su calendario de partidos en 2018 para evitar estos problemas al más puro estilo Federer o debería seguir compitiendo en tantos torneos?
Bien es cierto que la edad de Roger Federer no es directamente comparable a la del tenista español. Cinco años de diferencia si hablamos de deporte profesional del más alto nivel, es una diferencia notable a tener en cuenta. Roger, a sus 36 años y con su estilo de juego, planea desde hace un par de años un calendario con el foco claramente establecido sobre los Grand Slams, lo que le ha hecho ganar 3 de los últimos 5 disputados. Su participación en torneos ATP es escasa y solo aparece en algunos torneos previos a otros de mayor relevancia y en Masters 1000. La diferencia con Nadal es obvia, que a sus 31 años planteó un 2017 con más partidos lo que le llevó a la consecución de grandes torneos y del número 1 del ránking ATP.
No obstante, la cuestión que ha asaltado a numerosos analistas y personas relacionadas con el mundo del tenis, es si Rafa ha llegado a un punto en el que debería limitar su número de encuentros para evitar lesiones como la del pasado mes en Australia que evite que Rafa pueda llevar a cabo la consecución de algunos de los eventos más importantes del año. El propio Nadal es consciente de este problema y ya ha elaborado un calendario en 2018 mucho más light que el del año pasado.
Jugará menos torneos
En 2017 Rafa se apuntó a 20 torneos y disputó 78 encuentros, número que se reducirá considerablemente este año. Eso sí, 2018 traerá consigo la novedad de la participación de Nadal en Queen’s diez años después, año desde el que no consigue otro título en hierba. Este año el número de torneos previstos en el calendario de Rafa es de 18, dos menos que el año pasado pero aún lejos de los 11 que disputó Federer en 2017.
En mi opinión, Rafa cumplirá este 32 años en unos meses, y la edad en un deportista de élite es un factor a tener muy en cuenta. La clave del éxito de Rafa durante toda su carrera ha sido su fortaleza mental y física. De hecho, las temporadas en las que Nadal no ha estado al nivel de lo esperado han ido ligadas de la mano de bajones mentales, psicológicos, físicos, lesiones… A esta edad, es recomendable siguiendo la lógica de la psicología deportiva, mantener la cabeza en el deporte y reducir la carga física para poder estar al 100% en las grandes citas y competir con los mejores del mundo.
Cada año que pasa, la reducción de torneos y partidos debería ser progresivamente más acentuada. Y es que duele mucho, como aficionado español al tenis, ver a Rafa cojeando en unos cuartos de final de un Grand Slam y ver la impotencia en su rostros de no poder alcanzar otro éxito más de los que todos nos enorgullecemos.
