Petra Kvitova arrancó con triunfo su andadura en el Yarra Valley Classic WTA 500 de Melbourne al eliminar a Venus Williams por 7-6(6), 7-5. Se medirá con Nadia Podoroska en los octavos de final.
Por nombre iba a ser el partido de la jornada, pero últimamente Venus siempre crea esa incertidumbre de cómo puede estar en cancha. Sacó adelante su primer choque y se citaba con Kvitova que al ser una de las principales cabezas de serie del cuadro. Era la novena vez que se veían las caras y la octava vez que finalizaba un partido entre ellas ya que en Beijing 2014, no se disputó. Por tanto, llegaban con el cara a cara favorable con un 5-3 para la checa.
Kvitova está más acertada en los momentos importantes
Hubo un quiebre para cada una aunque fue por contrabreak. Fueron muy igualadas en todo momento, y llegaron a la muerte súbita en el primer set. Kvitova se fue al 4-2 para que acto seguido, gozara de tres bolas de set. Venus consiguió alcanzar el 6-6, pero a la cuarta bola de parcial, Petra cerró la manga.
En el segundo set disminuyeron los errores de la cuarta cabeza de serie del cuadro. Con su golpe de derecha estaba más acertada, y obtuvo un trascendente quiebre para marcharse por delante en el marcador. Además, se vio obligada a tener que levantar una bola de quiebre a la hora de su confirmación.
La lucha iba a continuar con un temple extraordinario por parte de la hermana mayor de las Williams. Recuperó el quiebre e hizo alargar un partido que parecía estar mucho más cercano para Petra. Además, la tenista checa, tuvo que salvar una bola de break para que Venus no se situara por delante en el marcador de la segunda manga.
Cabalgando adelante en el electrónico, Kvitova vivió dos oportunidades de partido al resto cuando el reloj marcaba las dos horas de duración. La primera se fue al pasillo de dobles tras querer jugarse un winner con el golpeo de revés con segundo de la estadounidense. Finamente, a la segunda opción que dispuso, selló su pase a los octavos de final del Yarra Valley Classic.
