Jannik Sinner continúa con un altísimo nivel y ahora puede con el neerlandés Tallon Griekspoor en sets corridos (6-2, 6-4) en su duelo por las semifinales del ATP 500 de Rotterdam. El italiano será rival de Alex De Miñaur en la gran final.
Sinner sigue ganando en Rotterdam
Momento de la segunda semifinal del ABN AMRO Open, con la presencia del máximo cabeza de serie, Jannik Sinner, buscando estirar su racha positiva luego de haber conquistado su primer título de Grand Slam en Australia. A lo largo de esta semana, el italiano logró dejar en el camino a Van de Zandschulp, a Monfils y a Raonic, quien abandonó al inicio del segundo set. Por su lado, Tallon Griekspoor quería continuar con su idilio con Rotterdam, en su sueño por ser el primer jugador local en ganar el torneo desde Jan Siemerink en 1998. El neerlandés ha sido una de las revelaciones de la semana, dejando fuera a nombres como Musetti o Hurkacz, y también a Ruusuvuori en los cuartos de final.
Sólido comienzo para el favorito
Un quiebre en el primer juego del partido en favor de Sinner, ya empezaba a marcar una tendencia clara, sin demasiado lugar a que Griekspoor pueda generar presión concreta o hacer jugar al público del estadio, que en su mayoría estaba apoyándolo. El flamante campeón de Australia estaba muy cómodo con su servicio, y más aún tras concretar un segundo break para colocarse 4-1 en el marcador. En el juego siguiente, el neerlandés iba a tener dos oportunidades de recuperar una de las roturas, pero Jannik resistía y afianzaba su ventaja. Sinner iba a establecer el 6-2 para quedarse con el primer set.
Victoria italiana por la vía rápida
Diferente la tónica para el segundo parcial, con un jugador local más enfocado, sosteniendo sus turnos de saque y luego tomando algunos riesgos de más en la devolución. El propio Griekspoor tomaba una posición más agresiva, buscando cerrar los puntos más rápido, incluso subiendo en varias oportunidades a la red. Sinner tenía algún pasaje de zozobra, pero aún así salvaría dos bolas de break en el 1-2, y luego otras dos en el 2-3, generando la frustración de un Tallon que se sentía jugando mejor, pero que no lo podía plasmar en el resultado.
El neerlandés no estaba siendo concretamente superado por el italiano, pero como suele pasar con los jugadores de esta jerarquía, en los momentos de mayor necesidad, sacan su mejor versión. En cero, y con una doble falta final, Griekspoor cedería su servicio en el noveno juego, para que Sinner tenga la chance de cerrar la faena con su propio saque. Y así iba a ser. El No.4 del mundo selló su pase a la final con un 6-4 definitorio, tras conectar otro saque ganador.
