Punto y final en Saint-Malo. Viktorija Golubic suma un nuevo título a su palmarés tras imponerse a Jasmine Paolini en la final (6-1, 6-3).
Llegaba el tenis a Francia y lo hacía con un torneo de categoría 125K. Y la reina ha sido una experta en arcilla, como es la suiza Viktorija Golubic. Una jugadora con un tenis defensivo y un buen revés a una mano con el que hace mucho daño en esta superficie. En la final se ha impuesto a otra gran terrícola como es la italiana Jasmine Paolini, en un duelo algo desnivelado en donde la experiencia de la suiza ha decantado la balanza ante una Paolini que no ha terminado de sentirse cómoda en ningún momento de la final, fruto de su mayor inexperiencia en finales de torneos de categoría WTA, y más ante jugadoras con un tenis con cambios de ritmo, como es el que tiene la suiza.
Ambas jugadoras llegaban a la final demostrando un buen tenis durante la semana en un torneo de alto nivel, pero que ha presenciado una final algo desnivelada. Con una Golubic que ha salido muy enchufada desde el minuto uno, ante una Paolini que se ha mostrado muy errática e imprecisa en sus golpes incapaz de hacer daño a una Golubic que se ha mostrado muy efectiva con su revés, el cual sabe manejar muy bien, una de las armas para que esta semana la suiza haya salido campeona en Francia.
Nuevo título para una Golubic que sigue demostrando su buena relación con la tierra batida, superficie en donde sabe manejarse muy bien.