Taylor Fritz certificó su boleto a los octavos de final en el Máster de Toronto luego de tachar al último local sobreviviente, Gabriel Diallo. El estadounidense jugó un tenis casi perfecto, venciendo en sets corridos al canadiense, quien no tuvo soluciones.
Fritz da cátedra de tenis en Canadá
Taylor Fritz (4°) y Gabriel Diallo (36°) se volvían a ver las caras después del antecedente que tuvieron en Wimbledon, donde la victoria cayó de lado del estadounidense. En esta oportunidad, los tenistas norteamericanos se cruzaban en la tercera ronda del ATP 1000 de Toronto, por un lugar en los octavos de final. Fritz, segundo cabeza de serie, avanzó de ronda luego de vencer al español Roberto Carballés en un ajustado partido. A su vez, el canadiense superó la primera prueba frente al italiano Matteo Gigante y quedó como el único tenista local en actividad. Este enfrentamiento prometía un juego de mucha intensidad tras lo sucedido en el Grand Slam londinense.
El estadounidense saca provecho de un quiebre fugaz
En los primeros compases del partido se pudo apreciar a un Diallo muy inconsistente, cometiendo errores con el servicio y tirando pelotas afuera, lo que le permitió a Fritz conseguir un quiebre sin esfuerzo. Por su parte, el estadounidense se mostró estable en su juego de saque, haciendo correr los tiros con solvencia para confirmar la ruptura. El canadiense no lograba adaptarse a la velocidad de pelota que traía su adversario y le costaba afirmarse en los intercambios. En el quinto game, Taylor generó nuevas chances de break, pero Diallo respondió con ejecuciones rápidas.
Con las cifras de su lado, el estadounidense resolvía con claridad para mantener la distancia en el score. Sin contratiempos, Fritz ejerció sus cualidades con total lucidez, administrando la ventaja y cerrando el primer set con un cómodo 6-4.
Fritz juega con soltura y se adjudica el triunfo
La segunda manga tuvo un comienzo más nivelado, donde ambos protagonistas supieron imponer sus características para establecer las primeras cifras en el score. Ya en el tercer juego, Taylor se hizo fuerte en el retorno, suprimiendo el tenis del canadiense y llevándolo al error para capitalizar un quiebre. Por consiguiente, el estadounidense hizo pesar sus armas en su turno de saque, ratificando el break para colocarse 3-1 arriba. Diallo no tenía margen de error y debía ser cuidadoso en cada golpe que realizaba. El canadiense siguió cosechando errores y le regaló otro quiebre a Fritz, quien se mantuvo firme en sus impactos para adueñarse de la victoria tras un 6-2 definitivo.