El español Alejandro Davidovich Fokina tuvo que lidiar con un gran problema en su encuentro contra el estadounidense Opelka en Atlanta. El tenista surgido en Málaga resistió las balas del norteamericano para derrotarlo con parciales de 7-5 y 7-5 en los octavos de final.
Davidovich mostró voluntad para avanzar en Atlanta
El Atlanta Open brindaba un llamativo cruce de octavos de final entre el español Alejandro Davidovich (43°) y el estadounidense Reilly Opelka (430°). Este último mencionado regresó a la actividad en el ATP de Newport después de ocho meses inactivo y alcanzó las semifinales del torneo. Opelka ha demostrado que está en condiciones para competir, en la primera ronda de Atlanta venció a su compatriota Kovacevic en sets corridos. Por su parte, el español hizo lo propio ante el francés Cazaux recuperando la confianza que necesitaba. La temporada de Davidovich no ha sido nada buena, solamente en Marsella pudo sumar dos victorias y eso fue en febrero. El estadounidense y el español se cruzaban por primera vez en el circuito.
El español logró retener los latigazos de Opelka
El inicio del partido tuvo que ser suspendido por la lluvia que cayó repentinamente sobre la ciudad de Atlanta, el español llegó a cerrar su primer turno de saque. Los tenistas volvieron al ruedo después de varios minutos y Opelka no tardó en desenfundar su poderoso servicio. En el tercer juego, Davidovich logró contener los saques de su rival, generó ocasiones de break, pero no logró ser preciso. El español sabía lo que tenía que hacer, estaba haciendo un buen trabajo con su tenis y se mostró firme con el servicio. Opelka fabricó múltiples chances de quiebre en el séptimo juego con devoluciones punzantes, aunque su adversario pudo resolver la situación con buena mano. Posteriormente, Davidovich afirmó la raqueta, pudo disminuir los saques del estadounidense y concretó el quiebre que le otorgó el primer parcial por 7-5.
El jugador de Málaga superó una difícil prueba
En el comienzo del segundo set, Opelka pudo imponer sus golpes distribuyendo la pelota, creó una oportunidad de ruptura, pero no consiguió sellarla. Mientras tanto, Davidovich se mantenía fuerte en los turnos de servicio, su propuesta le daba resultados ante el norteamericano. Si bien el estadounidense seguía acumulando puntos directos con el saque y lograba tiros efectivos con la derecha, el español se desenvolvía mejor en los intercambios. Recién en el octavo juego, Davidovich ajustó las ejecuciones, logró dominar parte de la disputa, pero no fue capaz de aprovechar las ocasiones que construyó. Al igual que en el parcial anterior, los tenistas no se sacaron diferencias y estiraron los números. El malagueño encontró la fórmula en el duodécimo juego, jugó con exactitud cada pelota y superó un duro escollo por doble 7-5.
