Francisco Comesaña utilizó todos sus recursos e hizo temblar a Rune en la segunda ronda de Roma. El argentino tuvo una gran actuación frente al danés, pero no fue capaz de concretar la gesta y se despidió del certamen.
Comesaña no logró derrumbar a Rune en el Foro Itálico
Luego de su buena actuación en Madrid, Francisco Comesaña (63°) arrancó con el pie derecho en el ATP 1000 de Roma, derrotando en dos parciales al alemán Daniel Altmaier. En la segunda ronda del torneo romano, el argentino se veía las caras con Holger Rune (10°), flamante campeón del Barcelona Open. El danés, por su parte, hacía su presentación en el Foro Itálico después de una corta travesía en el Mutua Madrid Open, donde se tuvo que retirar en el partido inaugural. Era la primera vez que estos dos tenistas se paraban frente a frente, Rune se posicionaba como el favorito, pero Comesaña venía arrastrando confianza y se encontraba con grandes posibilidades de dar el golpe.
El argentino se planta en el terreno y saca ventaja
En los primeros compases del partido se vio a un Comesaña dispuesto a forzar el juego del danés, luciéndose con su versatilidad en el retorno, lo que le permitió contragolpear para romper el saque de su rival. Luego, el argentino se mostró fino en su turno de servicio, desprendiendo ejecuciones tajantes para validar la ruptura, sin conceder puntos. Rune no estaba en sintonía con su tenis, cometía muchas equivocaciones y debía lidiar con la dosis del sudamericano. Mientras el danés intentaba definir su postura, Francisco limitaba sus opciones con una brillante defensa. Con la ventaja a su favor, Comesaña supo gestionar sus ejecuciones, doblegando el juego de Rune y generando espacios para quedarse con el primer set por 6-3.
Rune desvela su armamento para igualar el score
La segunda manga tuvo un inicio más equilibrado, donde ambos protagonistas supieron subrayar sus cualidades para marcar los primeros dígitos en el score. A diferencia del parcial anterior, Holger parecía estar más convencido de sus condiciones, pero no le resultaba fácil conectar puntos seguidos. En el cuarto game, Rune calibró sus herramientas, se lanzó al ataque con determinación y consiguió una ruptura fundamental. Acto seguido, el danés plasmó un tenis pulcro, afinando sus golpes para ratificar la diferencia. Posteriormente, Holger ejerció presión una vez más, fabricando bolas de break, pero se encontró con una gran respuesta del argentino. Aferrado a sus virtudes, Rune fue aumentando su nivel y consolidó la ventaja para adjudicarse el segundo parcial por 6-3.
El danés se queda con una sensacional batalla
En las primeras acciones del último asalto, el danés se plantó en el fondo, creando múltiples ocasiones de quiebre que fueron suprimidas por el sudamericano, quien reaccionó notablemente. En el segundo juego, Comesaña respondió desde el retorno, siendo paciente y contragolpeando con un revés paralelo para cosechar un quiebre. Sin embargo, el argentino no pudo hacerse fuerte en su turno de saque y Rune recuperó rápidamente el break para luego equilibrar las cifras. Luego, Francisco supo resistir ante las demandas de su oponente, manteniendo una postura aguerrida. En el séptimo game, Holger desplegó sus armas en la devolución, desbordando al marplatense con una nueva ruptura.
Con los números en contra, Comesaña intentó desestabilizar al danés con distintas variantes, aunque no pudo fortalecer su juego y dejó escapar la posibilidad de restablecer la paridad. Finalmente, Rune se hizo cargo del servicio, defendiendo a diestra y siniestra con todos los recursos posibles para adueñarse de una épica victoria en tres sets (3-6, 6-3, 6-4).