La española sumó su primera victoria WTA tras remontar un duro compromiso ante la octava cabeza de serie del torneo. Bucsa siempre creyó en sus opciones y al final pudo alzar los brazos en señal de victoria (3-6, 6-4, 6-1). En la siguiente ronda espera Sasnovich o Xiy. Wang.
Cristina Bucsa llegaba al WTA Belgrado con el objetivo de intentar ser una de las posibles sorpresas del cuadro. Todo empezó en la fase previa, aunque no tuvo mayores problemas para superar a Hataouka y Radanovic, ya que esta última se acabó retirando cuando el partido estaba bajo control de la española. Cristina cayó en el cuadro final emparejada ante la montenegrina Kovinic, octava cabeza de serie.
Era un duelo que debía haberse jugado muchas horas antes pero finalmente la lluvia en Belgrado retrasó la jornada. Finalmente se jugó por la noche. El duelo comenzó parejo y con ambas jugadora con muchas dificultades para poder aguantar el turno de servicio. Un total de cuatro roturas en los seis primeros juegos para irse al 3-3. En ese momento Kovinic se puso por delante en el marcador y con la iniciativa pudo presionar a su rival. Llegó el break en el momento decisivo y la montenegrina sacaba para llevarse el primer parcial. No falló y tomaba ventaja en el marcador.
Objetivo cumplido de Bucsa
Bucsa siguió con la misma dinámica, esperando su momento. Las alternativas al resto no paraban de llegar y es que se llegaron a ver hasta siete roturas en la segunda manga. Después de todo este intercambio de golpes salió ganando Bucsa que al resto ganaba el set por 6-4 y se animaba sabiendo que estaba cerca del objetivo de sumar la primera victoria WTA.
Empezó Kovinic arriba con otra rotura como no podía ser de otra manera para poner el 1-0. Bucsa luchó y de repente llegó un parcial que en ni en sus mejores sueños hubiera imaginado. Un total de 6 juegos consecutivos para acabar sumando la remontada que le hacía recordar este partido para toda su vida tras cosechar su primera victoria WTA.
