La tenista catalana dice adiós de la peor manera en La Bisbal. Bassols sufrió molestias en su calentamiento y acabó retirándose en el segundo juego por problemas en su tobillo.
Bassols se marcha de la peor forma en La Bisbal
El último duelo del jueves en el WTA 125 La Bisbal tenía representación española. Marina Bassols tras su triunfo al límite ante Babos en el debut se enfrentaba ante otra jugadora húngara, en este caso Dalma Galfi. Era a priori un gran partido y la catalana iba a intentar ser la segunda jugadora española clasificada en los cuartos de final tras Rebeka Masarova que venció a su compatriota Jessica Bouzas. Era el primer enfrentamiento entre ambas y se esperaba un duelo parejo con dos jugadoras que optaban a llegar hasta las rondas finales.
Una inoportuna lesión
El problema es que Bassols durante el calentamiento tal y como comentó ya había sentido algunas molestia y un chasquido en su tobillo. A pesar de ello intentó jugar el partido. Marina saltó a pista y comenzó con tres bolas de break. La húngara salvaba la situación y era capaz de llevarse ese primer juego. Tras el cambio de lado Bassols requirió la asistencia del fisioterapeuta.
La española entre aplausos saltaba al otro lado de la pista y a los pocos segundos, tras perder sus dos primeros puntos con el servicio y ver que tenía muy poca movilidad ya que seguía resentida de ese tobillo decidió parar, ya que hay que pensar en las próximas semanas debido a que llegan torneos muy importantes como los de Madrid o Roland Garros. De esta manera se confirman las malas noticias para una Marina Basolss que tiene que despedirse como no les gusta a los tenistas, retirándose de un torneo y además en casa, en el torneo catalán del WTA 125 La Bisbal.