El tenista argentino Guido Andreozzi superó al chileno Tomás Barrios Vera por 7-5, 6-2 tras 1h46m de juego en la primera ronda del Challenger 100 de Trieste. De esta manera, el No. 257 del mundo se enfrentará con el búlgaro Adrian Andreev en los octavos de final.
Guido Andreozzi ha tenido vaivenes en el circuito, en el cual estuvo Top 70 en 2019 y tras la pandemia estuvo muy cerca de colgar la raqueta. Guardando consigo mismo una gran jerarquía y experiencia, regresó obteniendo enormes resultados en dobles para pasar ello al singles y subir en el ranking. En esta temporada jugó más torneos en parejas que en individuales. La final en Cali y los cuartos de final en el Challenger de Tigre fueron lo más destacado. También, superó la qualy en el ATP de Acapulco y puso en aprietes a Casper Ruud. En Trieste se medía con Tomás Barrios Vera, que este año se quedó con los Challengers de San Luis Potosi y Florianópolis, y final en Poznan y Piracicaba.
Andreozzi se lleva una enorme victoria
Guido Andreozzi y Tomás Barrios Vera se cruzaban las miradas en la primera ronda del Challenger de Trieste.
Los primeros seis games del partido se vivieron con gran intensidad, ya que ambos proponían ataques desde sus saque y derecha, y con la devolución apretando para generar oportunidades. En el tercer game, el chileno encontró mayor precisión para romper y adelantarse en los números. No obstante, el argentino impuso su potencia y jerarquía para recuperar y llegar igualados al sexto juego. Tras ello, ambos fueron sosteniendo con amplitud y sin ceder terreno. Sin embargo, luego de mantener con muchos primeros saques, Andreozzi avanzó con la recepción y rompió para llevarse el set por 7-5 en 1h01m.
Lanzado, suelto y envalentonado, Guido aceleró en el comienzo de la segunda manga, fue agresivo y aprovechó cada error de su rival para concretar una doble ruptura. Luego de ese aluvión en el que se mostró perdido en la cancha, Tomás pudo recuperar un quiebre para ponerse en juego. Sin embargo, en el séptimo juego desperdició otra chance de ruptura y el score le quedó muy lejos. Sin errores y mostrando mucha autoridad, Andreozzi sentenció el 7-5, 6-2 tras 1h46m.