La jugadora canadiense se proclamó campeona al vencer en la final a la ex número uno Kerber (6-4, 3-6, 6-4). Con 18 años ha batido récords de precocidad y ha demostrado que tiene una confianza poco habitual a su edad.
Andreescu y Kerber disputaron la primera final de las dos que se iban a jugar el domingo para poner punto y final al primer Premier Mandatory y Masters 1000 de la temporada respectivamente. A priori iba a ser un partido largo, atractivo y marcado por los duros intercambios desde el fondo de la pista. Nada de lo previsto falló y fue una final digna de ver con un partido fabuloso de más de dos horas de duración.
Desde el inicio la canadiense demostró que a pesar de sus 18 años está lista para comenzar a hacer historia en el circuito WTA. En los primeros juegos del partido consiguió una rotura que le sirvió para llevarse la primera manga. Todo cambió en el segundo set, ya que la ex número uno de la clasificación llevaba la iniciativa en el marcador. Esto le valió para poder apretar más al resto y de esta manera consiguió un break para poder igualar el marcador.
Con el público enfervorecido, tras estar disfrutando de un gran partido todo se iba a decidir en la manga definitiva. Kerber parecía estar mejor físicamente. La alemana consiguió una rotura pronto, pero justo en el siguiente juego Andreescu devolvía el golpe a su rival con un quiebre en blanco dejando claro que no se iba a rendir.
Bianca Andreescu 🇨🇦 consigue el primer Premier Mandatory del año en #IndianWells al superar en la final a Angelique Kerber 🇩🇪 (6-4, 3-6, 6-4):
✔ Primer título de su carrera con 18 años.
✔ Subirá del puesto 60° hasta el 24°.
✔ Llegó al torneo por una invitación. pic.twitter.com/eQJkWE9dTc
— CanalTenis.com 🎾 (@canal_tenis) March 17, 2019
La canadiense necesitó de la asistencia del fisio, ya que todo el esfuerzo físico que llevaba durante la semana lo estaba pagando. Poco a poco y cada vez con mayor consistencia se iba llevando sus juegos. Andreescu dispuso de tres bolas de partido con su servicio para cerrar el encuentro. Ambas se sentaban en el banquillo con 5-4 para la jugadora que más apoyaba el público. Andreescu buscaba su derecha para intentar dominar los puntos. Esta vez no perdonó y a la cuarta ocasión se convirtió en campeona de Indian Wells, después de entrar al torneo con una invitación. Con este triunfo se convierte en la ganadora más joven desde Serena Williams en 1999.