Carlos Alcaraz exhibió una superioridad física y táctica notable ante el número uno del mundo para ser campeón en Roma. Con decisiones certeras y ritmo inquebrantable, doblegó a Jannik Sinner y conquistó por primera vez el título en el Foro Itálico.
Carlos Alcaraz reina en las tierras romanas
La eternidad de Roma se preparaba para escribir una nueva página en su libro sagrado. Jannik Sinner (1°), el hijo pródigo de Italia, regresaba del silencio con corona en mano, dispuesto a conquistar el templo de su nación. Frente a él, Carlos Alcaraz (3°), guerrero del sur, feroz y renacido, ya campeón en Montecarlo y señor del polvo de ladrillo. Se cruzaban por undécima vez, con un pasado que favorece al español, pero con un presente que arde parejo. El italiano llegaba a esta final con 26 triunfos consecutivos y enfrente tenía a quien lo había vencido por última vez. Todo confluía en un duelo cargado de expectativas, donde la historia y la revancha se citaban bajo la misma luz.
El español toma la posta en el desempate
Los acordes iniciales del duelo reflejaron un tenis medido de los protagonistas, tanto el español como el italiano buscaban colocar sus ejecuciones, sin arriesgar demasiado. Sinner utilizaba mejor sus virtudes en el saque, aunque en el vendaval de golpes la diferencia era mínima. La derecha de Carlos se desprendía con mayor potencia, lo que le permitía comandar los ataques. En el quinto game, el español mostró sus dotes en el resto, contrarrestando los tiros del italiano y produciendo una bola de break, pero Jannik supo resolver con jerarquía. A medida que transcurrían los juegos, los tenistas afinaban sus herramientas, generando ataques eficientes.
Durante el desarrollo de los puntos, se veía un Alcaraz más ágil en el terreno, desplazándose con una gran versatilidad y buscando los espacios para contragolpear. Recién en el duodécimo game, Sinner forjó un tenis consistente en la devolución, forzando errores en el rival y creando chances de quiebre, aunque se encontró con una defensa brillante del murciano. Sin rupturas de por medio, el recorrido desembocó en un tiebreak, donde Alcaraz supo manejar sus armas, dando un paso hacia adelante para cerrar el primer set a su favor.
Alcaraz activa su máximo nivel y abrocha el título
El comienzo del segundo asalto resultó un tanto incómodo para el tenista español, quien debió lidiar con puntos adicionales en su turno de saque. De igual manera, Carlos mostró mayor claridad en el retorno, contrarrestando los avances del italiano y marcando un quiebre esencial. Acto seguido, el español desparramó su talento por todo el escenario, dirigiendo el compás con sabiduría para confirmar la ventaja. En el cuarto game, el joven murciano volvió a desactivar los recursos del número uno, resaltando su tenacidad y capitalizando otra ruptura. Con los dígitos en su poder, Alcaraz combinó valentía con jerarquía, dominando a Sinner en su tierra para proclamarse campeón de Roma tras un 6-1 final.
The moment 🏆#IBI25 pic.twitter.com/bOJSHpkwsm
— Internazionali BNL d’Italia (@InteBNLdItalia) May 18, 2025