El tenista español analizó en sala de prensa su victoria en cuatro sets frente al alemán Jan-Lennard Struff, gracias a la cual logró su billete para la segunda semana de Wimbledon 2025.
Alcaraz y la presión extra de los rivales de ir avanzando rondas
Por cuarta vez consecutiva en su carrera, Carlos Alcaraz estará presente en la segunda semana de Wimbledon 2025, tercer Grand Slam del año. El vigente bicampeón del torneo británico se deshizo del siempre incómodo Jan-Lennard Struff en cuatro sets, para ahora medirse al ruso Andrey Rublev, 14º del mundo, por un puesto en cuartos de final.
En declaraciones post partido recogidas por la web oficial de la ATP, el tenista español sostuvo que, con la racha de triunfos consecutivos que atesora en torneos grandes, 10, y en este mismo escenario, 17, los rivales sienten que tiene que hacer mucho para ganarle, lo cual también genera más confianza al murciano, que también destacó su alto nivel de concentración durante todo el partido, que le sirvió para contener los golpes agresivos de su rival.
Cuantas más victorias, más difícil de batir
“Una de las grandes partes del tenis es cuando vas ganando partidos muy buenos a gente muy buena. Esa presión a los rivales es inevitable. Cuando me enfrento a ellos y ellos ven la confianza que tengo, los partidos que voy ganando, que me voy sintiendo cada vez más cómodo y estoy jugando a un gran tenis… esa presión siempre está para ellos. Se trata de hacer tu trabajo, hacerlo de la mejor manera posible. Y luego, a medida que vas pasando rondas, los rivales sienten esa presión extra, lo cual siempre se agradece“.
Sin perder la concentración
“Sabiendo que iba a tener las bolas de break justas, sobre todo en el primer y tercer set, y que en el cuarto me costó más… Esos jugadores que te meten tanta presión con el saque te obligan a no fallar nunca. Quieres aguantar el resultado y eso te genera un estrés extra. Hoy lo hemos gestionado de buena manera, intentando estar lo más tranquilo posible y jugar un buen tenis“.
