El tenista italiano Franco Agamenone superó al argentino Sebastián Báez por 3-6, 6-1, 7-5 tras 2h25m de juego en la segunda ronda del ATP 250 de Umag. El No. 136 del mundo se enfrentará con Marco Cecchinato en cuartos de final.
Franco Agamenone ha luchado contra viento y marea en toda su carrera profesional, pero a sus 29 años encontró una gran madurez deportiva para competir a un alto nivel. Tras estar suspendido por doping y nacionalizarse italiano (nació en Rio Cuarto, Argentina), pudo hacer piso en Europa, competir en Interclubes y empezar a soñar con los grandes torneos. Luego de un 2021 en el conquistó 7 títulos (5 ITF y 2 CH), se metió en el Top 200. En este 2022, ya celebró en el Challenger de Roma, hizo semifinales en Bendigo y superó la qualy de Roland Garros, entre sus grandes resultados. En Umag, venció a Horansky y Gombos para avanzar al main draw, en el cual eliminó a Djere.
Sebastián Báez no para de escalar en el ranking y de confirmar que es uno de los mejores tenistas del circuito. En un 2022 impresionante, que lo ubica como No. 32 del mundo, el argentino conquistó su primer título ATP en Estoril y llegó a la final de Santiago y Bastad. Además, hizo cuartos de final en Córdoba y Lyon, y jugó en un altísimo nivel en Australian Open y Roland Garros. Previo a Croacia, cedió en primera ronda de Hamburgo. Ya en Umag, partió como cuarto favorito y comenzó su camino en octavos de final.
Agamenone se lleva la batalla
En el primer parcial, Sebastián Báez impuso su favoritismo y todo su tenis para avasallar a su rival. El argentino quebró dos veces consecutivas, contra una, y cerró la manga por 6-3 en 34 minutos.
Cuando parecía que todo se decantaba para el lado del argentino, Franco Agamenone se metió en partido, impactó la pelota con mucha más potencia y fue lapidario con su contrincante. El italiano quebró dos veces, se apoyó en su saque para salvar seis break points en todo el set y empardó por 6-1 en 41 minutos,
Finalmente, la gran batalla llegó al set final, en el cual comenzaron ambos prolijos al servicio e igualados en 3. En el séptimo game, el No. 32 del mundo escapó de dos puntos de quiebre, para luego llenarse de confianza, romper en 0 y sacar para partido. Sin embargo, los nervios y la presión hicieron fuerza y Sebastián no logró cerrarlo. Con el overol puesto y luchando todas las pelotas, Agamenone trabajó, corrió y luchó hasta el match point (un rally de 30 golpes) para cerrar un triunfazo por 3-6, 6-1, 7-5 tras 2h25m de juego.