El tenista japonés Sho Shimabukuro se impuso 6-4, 6-4 sobre el francés Geoffrey Blancaneaux para consagrarse campeón en Túnez y levantar su segundo título ATP Challenger.
El título en Túnez se definía entre Sho Shimabukuro y Geoffrey Blancaneaux, dos grandes frecuentadores de este circuito. El japonés llegaba desde la fase previa, habiendo vencido a seis jugadores antes esta cita. Entre ellos, Bolt, Houkes, Olivieri, Barrios Vera, Dougaz y De Jong. Estos resultados no eran para nada sorpresivos, ya que recientemente se adjudicó el Challenger de Nothamburi y alcanzo la final de un M25. A pesar de haber ingresado al cuadro principal de forma directa, el francés había recorrido un camino más complejo, derrotando en las rondas anteriores a Sousa, Coppejans, Marterer y Gojo, primer sembrado.
Shimabukuro golpea primero
Como toda final, no iba a ser un trámite sencillo para ninguno de los dos. Sin embargo, Blancaneaux sería el primero en ponerse arriba del marcador con un rápido quiebre. Pocos juegos después, Shimabukuro lograría la igualdad. Jugando puntos cortos, dominó el transcurso del partido y luego de sumar otro quiebre, se adjudicó el primer parcial por 6-4.
El poderío japonés triunfa en Túnez
Ya con la ventaja que logró en la primera manga, Shimabukuro se soltó y sumo otra pronta rotura para ponerse 1-0. Blancaneaux buscaba volver al partido y lo haría con éxito, quebrando el servicio del japonés para poner tablas. El cotejo dio un cambio radical, con los games cada vez más cortos y muy pocos riesgos, lo que les permitía mantener sus saques sin problemas. El japonés aprovechó el mal turno de servicio de su rival y concretó un nuevo quiebre del partido, y en cero, para colocarse 4-3 arriba. A pesar de que el francés mantuvo su servicio, Shimabukuro se llevó un juego super extenso y selló el triunfo por doble 6-4.