Diego Schwartzman sigue avanzando en la clasificación del US Open. El argentino derrotó a su compatriota Thiago Tirante en sets corridos y avanzó a la fase final de la clasificación.
Schwartzman a un pase del cuadro principal
En su último Grand Slam como profesional, Diego Schwartzman (247° ATP) se abre al disfrute en New York, torneo que lo vio dos veces cuartofinalista en los últimos años. El argentino consiguió un gran triunfo sobre Pellegrino en la primera ronda de la clasificación, para llegar a la fase final de la qualy, Diego se topó con un compatriota, el argentino Thiago Tirante (95° ATP).
Diego se hace fuerte y estira su paso en el último Grand Slam
El partido entre Schwartzman y Tirante comenzó con una clara diferencia en la estrategia de ambos jugadores. Schwartzman, fiel a su estilo, se apoyó en su solidez desde el fondo de la cancha, con golpes precisos y pocos errores no forzados. Su capacidad para cambiar constantemente las direcciones de los golpes generaba incomodidad en Tirante, quien a pesar de buscar ser más agresivo con su drive y derecha invertida, no lograba desbordar a su rival. A lo largo del set, se vivió un duelo muy físico, con largos peloteos y un intercambio de golpes que mantenía el marcador ajustado.
Ninguno cedió su servicio hasta el décimo primer juego, cuando Schwartzman, aprovechando la presión del momento, quebró el saque de Tirante en el 5-6. Este quiebre crucial le permitió a Diego llevarse el primer set por 7-5, marcando la diferencia con su consistencia mental y la habilidad para mantenerse enfocado en los puntos clave.
El segundo set continuó bajo una dinámica similar. Schwartzman mantenía su solidez desde el fondo, mientras que Tirante intentaba imponer su ritmo con golpes más agresivos. La diferencia técnica entre ambos jugadores se hacía evidente en los momentos importantes. Diego logró un quiebre temprano para ponerse 3-1, mostrando su capacidad para capitalizar las oportunidades, pero la resistencia de Tirante no decayó, logrando devolver el break y empatar el marcador en 3-3. Sin embargo, cuando la tensión subía, Tirante sufría con su precisión, dejando que los nervios afectaran su juego. En un momento crucial, con Schwartzman sirviendo para partido en 5-4, Diego aprovechó su segundo match point con un impecable passing de drive, cerrando el encuentro 6-4. La experiencia y control emocional de Schwartzman fueron clave para superar a un Tirante. Aunque mostró destellos de brillantez, no pudo sostener su nivel en los momentos decisivos.