La griega superó 6-3, 6-0 a la francesa Caroline Garcia en las semifinales del WTA 1000 de Guadalajara. Por el segundo título de su carrera, y claramente el más prestigioso, se medirá a Caroline Dolehide.
Al inicio de la temporada, Maria Sakkari era una de las jugadoras que generaban mayor expectativa. Ese peso no resultó ser negativo para la griega, que firmó un comienzo dentro de todo positivo. Jugó un gran tenis en la United Cup y en Linz, Doha, Indian Wells y Madrid, donde alcanzó las semifinales. Si bien es cierto que tuvo altibajos, con tempranas derrotas y partidos que no debía perder en cuanto a su favoritismo, logró recular y volver a las primeras portadas del circuito. Se metió entre las cuatro mejores de Berlín, sobre césped, y fue finalista en Washington. Luego del US Open y su desahogo en conferencia de prensa, llegaba al torneo mexicano. Allí, eliminó a Hunter, Giorgi y Arango. Por ello, chocaba con Caroline Garcia por el pase a la definición.
Sakkari muestra un tenis de alto voltaje
El partido comenzó de manera intensa. En el primer game, Sakkari fue de menos a más, expuso sus dotes defensivos y salvó un break point para ponerse 1-0. A pesar de que se sostuvieron por unos minutos, en el tercero la griega presionó, distribuyó con sus mejores tiros y se encontró con tres bolas de break. Aunque no fue fácil, tomó la última de ellas y se adelantó por 3-1. A partir de allí, Maria no mostró grandes cambios en su juego, siguió por la senda de la intensidad y las bolas profundas para mantener la ventaja y disponer de la oportunidad de cerrar el primero. No sintió presión, marcó la diferencia con sus primeros saques y se lo llevó por un sólido 6-3.
En el segundo, se mostró con hambre de más y no dejó lugar a cuestionamientos. Haciendo daño con su revés paralelo y su aire ante la altura, Sakkari rompió en dos ocasiones consecutivas y enmarcó un 3-0 en el score. Si bien la diferencia era abultada, Caroline no bajó los brazos. Tiró por la borda la frustración, el enojo y empezó a complicar a Maria. De hecho, tuvo tres break points. No obstante, Sakkari interpuso su gran momento, no se desesperó y confirmó arduamente su turno para ponerse 4-0. Desde ahí, fue totalmente superior, no le dio chances y con otro quiebre selló el 6-3, 6-0.