Ryan Peniston consigue una sólida victoria frente al belga Kimmer Coppejans en dos parciales (6-3, 7-5) para consagrarse campeón en el Challenger de Hersonissos 5. El británico conquista así su segundo título en este circuito Challenger.
Cuadro ATP Challenger Hersonissos 5 2025
Peniston, nuevo campeón en Grecia
Domingo de definición en la Lyttos Beach Tennis Academy, para confirmar el campeón de esta quinta edición del torneo de Hersonissos en esta temporada. Una prometedora final, con la presencia de dos de los principales preclasificados del cuadro. Kimmer Coppejans, máximo cabeza de serie, llegaba a esta instancia luego de haber dejado algunas dudas en su camino, por ejemplo cediendo sets en tres de sus cuatro presentaciones. En semifinales, el belga había superado con remontada incluida al checo Hynek Barton.
Del otro lado de la red estaba el zurdo Ryan Peniston, que se destacó por la parte baja del cuadro, partiendo como cuarto cabeza de serie, aprovechando al máximo cómo se le fueron abriendo los cruces ante eliminaciones tempraneras de los otros favoritos. El británico logró vencer en sets corridos al francés Antoine Escoffier para llegar a su primera final Challenger desde 2023, cuando ganara su único título en la categoría.
Gran victoria del británico en Hersonissos
Un desarrollo del primer set muy ajustado, donde Coppejans lograría tener una primera oportunidad de quiebre temprano, aunque sin poder encontrar diferencias en los números. En un parcial que parecía irse derecho rumbo al tiebreak, el británico iba a concretar la primera rotura de la tarde en el séptimo juego, para colocarse 4-3 arriba. Sacando máximo rédito de ese pasaje positivo, Peniston firmaría un nuevo quiebre para acabar sellando la manga a su favor por 6-3.
Pasaje de dudas promediando el segundo set, donde Peniston lograría colocarse break arriba en dos ocasiones, pero luego no podía confirmarlo con su saque, y entonces Coppejans mantenía la ilusión de dar pelea por una remontada. De hecho, el belga volvería a tener una chance de oro en el 5-5, sin poder capitalizarlo. En el duodécimo juego, otra vez al borde del desempate, el británico iba a concretar el quiebre para sentenciar la manga a su favor por 7-5.