Nicolás Jarry consiguió el acceso a los cuartos de final del ATP 500 de Beijing al eliminar a Matteo Arnaldi en tres horas mediante un 6-7(4), 7-6(4), 6-3.
Tras haber derrotado a Tsitsipas en la jornada pasada, Nicolás Jarry afrontaba el primer turno de la pista Diamond del recinto chino ante el italiano Matteo Arnaldi que venía de superar sus partidos de la fase de clasificación. Además, logró el triunfo ante JJ Wolf en su primer choque en el cuadro final.
El tenista chileno entró en la pista construyendo una dinámica muy positiva para sus intereses. Consiguió el quiebre en el primer juego y después con esas sensaciones de ser quien dominaba sobre la cancha, se encontró con otra opción para que el doble break pudiera existir. No ocurrió de esa manera y el tenis del italiano iba a ir en constante evolución. Más constante y mostrando que también es capaz de saber encontrar golpeos ganadores de imponer un alto ritmo sobre la cancha siendo él quien se ponía en la línea del fondo de cancha.
Arnaldi da la vuelta e iguala el set
Igualó la cita y las sensaciones se equilibraron mucho. Matteo, estaba teniendo una marchita más en sus turnos al saque encontrando rédito pese a que el chileno, intentara buscar sus opciones. Llegaron a un tie-break donde la inercia continuó siendo el equilibrio. Jarry, por su parte, con un error a la red otorgó el mini break y después en el 6-4, tras un punto luchado desde el fondo, estampó otro golpeo contra la malla dando así al italiano la confirmación de que se colocaba por delante tras una hora de parcial.
Momentos comprometidos para Jarry
Los comienzos de la segunda cita trajeron protección cuando ejecutaban con el primer golpe. Sería Nico el que daría un pasito adelante cuando la situación se encontraba donde los dos partidarios caminaban muy equilibrados. Parecía que el quiebre sería muy trascendente, pero Arnaldi se encontró con el contrabreak. Por tanto, continuaron su andadura en la cita hasta que el chileno primero tuvo un 0-30 en el 4-5 pero lo salvó. Después, la situación sería todavía más drástica. Fue un 0-40 que se transformaban en bolas de partido. Aun así, pasito a pasito, haciendo bailar a Matteo, cosechó todos los demás puntos para sacar el juego adelante y llegar a una nueva muerte súbita.
El italiano se mostraría molesto con lo sucedido tras haber mantenido el temple durante toda la cita después de ese inicio de encuentro complicado para él. El tie-break, todavía tendría su dificultad para el chileno con Matteo adelantándose con 4-3 y mini break. Jarry, fortalecido de las complicadas situaciones albergadas durante los minutos pasados, logró dar la vuelta al electrónico y llevárselo con un 7-4.
Bajo control de Jarry
Fue una dosis de moral enorme para el chileno poner la igualdad y de la manera que lo había hecho. Era quien manejaba los tempos de la cita, pero en uno de los primeros turnos del tercero, no aprovechó esas opciones en un largo juego. En el próximo tampoco, pero lejos de que le afectara a nivel psicológico mientras Matteo cada vez se encontraba con más problemas y su paciencia estaba en decadencia, el chileno lograría el quiebre. Se colocó con 4-2 y servicio y aquello le sirvió para llegar al desenlace. Con el 5-3, y saque, a la primera bola de partido, Jarry accedió a los cuartos de final del ATP 500 de Beijing al derrotar a Arnaldi.
