Leylah Fernandez derrotó por 7-6(5) y 6-2 a Sara Bejlek en la primera ronda del Australian Open. De esta manera, la canadiense aguarda por la ganadora entre Parks o Snigur.
Fernandez da el primer paso
Gran desafío para Leylah Fernandez en el Australian Open, el primer Grand Slam del año. La canadiense, finalista en 2019 en Nueva York, afrontaba su segunda competencia de la temporada, tras la United Cup. Allí, derrotó a Seguel y no pudo con Sakkari, siendo una eliminación temprana. Del otro lado de la red se encontraba Sara Bejlek, promesa del tenis checo que venía de superar la clasificación.
La canadiense destraba un complejo inicio
De entrada, Fernandez tomó la iniciativa, no dejó respirar a su rival y eso se vio reflejado en el marcador. La canadiense, experimentada en este tipo de torneos, creó tres oportunidades, aprovechó la segunda y, con su servicio, confirmó el quiebre. A partir de ahí, bajó la intensidad, usó la cabeza y fue llevando de a poco los números. De todas formas, con esa inocencia de adolescente, Bejlek encajó varios tiros ganadores y, de un momento a otro, puso tablas. Tras ello, el partido se volvió parejo, con largos juegos y extensos intercambios. Sin sacarse diferencias, definieron la manga en un tie-break. Fernandez, de menos a más, se la llevó por 7-6(7-5) en casi una hora.
Avanza en sets corridos
En el segundo, la checa tomó el protagonismo. Con la necesidad de nivelar el score, se soltó y expuso un tenis de alto nivel. De todas formas, eso duró muy poco. Aunque rompió en el inicio, mostró falencias a la hora de servir y la canadiense no perdonó. Sin apresurarse, Fernandez marcó presencia, la movió de lado a lado y, de manera sencilla, pasó adelante por 4-2. Continuando por esa senda, la canadiense exprimió la falta de energía de su oponente y selló la victoria. Fue 7-6(5) y 6-2 en 1h33m de juego.