Grigor Dimitrov y Marton Fucsovics se medían por un lugar en los cuartos de final del ATP Rotterdam. Allí el búlgaro volvió a mostrar su confianza e impuso sus condiciones ante el húngaro.
Dimitrov sigue dulce en Rotterdam
Grigor Dimitrov está en un gran momento tenístico y su objetivo de volver a meterse en el Top-10 sigue cada vez más cerca. El búlgaro mostró un tenis de primer nivel a lo largo de estos meses y pese a un traspié en Australia, sumó una final y un título. En Rotterdam, Dimitrov busca dar el golpe y llevarse la corona. En los octavos de final no tenía un rival sencillo como lo es Marton Fucsovics, que si bien no tuvo su mejor inicio de año, siempre es un hueso duro de roer y sobre todo en canchas rápidas. Era la quinta vez que se enfrentaban en el circuito, con dos victorias por lado en la previa.
El búlgaro golpea primero
En el primer set Dimitrov buscaba imponer su ley y sacar las primeras diferencias del partido, Con ambos manteniendo sus servicios en los dos juegos iniciales, llegaban las primeras chances. Si bien el búlgaro buscaba agresividad, Fucsovics lo puso contra las cuerdas en el tercer juego con dos chances de quiebre que Dimitrov pudo remontar. Desde ahí la historia se estabilizó, hasta que Dimitrov apretó el acelerador y en el octavo juego del primer set consiguió el quiebre de saque que lo puso arriba. Con el 6-3 inicial, Dimitrov se encaminaba a una nueva victoria.
Dimitrov destraba el segundo set para avanzar a cuartos
Grigor Dimitrov no tuvo un trabajo nada sencillo en el segundo set. Fucsovics levantó su nivel desde el servicio y no pudo aprovechar sus chances de conseguir quiebres. Así fue como todo se mantuvo bastante igualado e incluso el húngaro tuvo sus chances de llevar todo a un tercer set. En el 6-5 a favor, Fucsovics tuvo su única posibilidad de llevarse el set con un quiebre. Sin embargo apareció el mejor tenis de Dimitrov para poder remontar y luego quebrar el servicio para cerrar el marcador final por 6-3 y 7-5 y avanzar así a los cuartos de final, donde se medirá ante Holger Rune o Alexander Shevchenko.