El español venció por 6-7, 7-6 y 6-1 al francés Hugo Gaston en las semifinales del ATP Challenger 125 de Sevilla. Por el título, el primer sembrado se medirá al vencedor entre Valentin Royer y Calvin Hemery.
Roberto Carballés Baena padeció un complicado inicio de temporada, con tempranas derrotas en Pune, Australia y los cuatro torneos que disputó por Sudamérica. Al no ser su superficie preferida, no tuvo mucho que hacer ante los especialistas y se despidió rápidamente de Indian Wells, Phoenix y Miami. En el regreso a la arcilla, esta vez en Europa, jugó un tenis de alta intensidad para quedarse con el título de Marrakech, aunque en los restantes tuvo altibajos, como la enorme victoria sobre Rune. Posteriormente, tampoco desentonó en el césped ni el cemento, por lo aterrizaba en Sevilla para dar vuelta la página. En los partidos anteriores, se impuso sobre Cervantes, Lopez Montagud y Elias Ymer, por lo que ahora debía chocar con Hugo Gaston.
El de Toulouse avanza en sets corridos
El partido comenzó de una manera intensa, donde un Carballés electrizante imponía un tenis de alto voltaje para sorprender de entrada. Luego de quedarse con el juego inicial, el español mostró concentración, eficacia y quebró en el segundo. Si bien Roberto pudo mantener la ventaja por varios minutos más, Gaston logró resurgir, elevar su nivel y recuperar esa diferencia, aunque aún debía sostener su servicio. Tras hacerlo, el francés no se quedó conforme y cambió radicalmente su postura, lo que le dió buenos resultados. Con variantes, tiros ganadores y puntos que enredaron a Carballés, volvió a romper para esta vez adelantarse 4-3. A la hora de cerrarlo, tuvo altibajos, falló en gran cantidad y cedió. Ya que ninguno pudo pasar adelante nuevamente, el primero se decidía en el tie-break. Allí, Hugo mostró jerarquía y lo ganó por 7-6(7-2).
El local atraviesa una odisea para avanzar
Con la necesidad de dar vuelta el marcador, Carballés expuso lo mejor de sí, le sacó jugo a los numerosos errores de su contrincante y al apoyo de su gente. De esa manera, se adueñó de dos breaks y plasmó una importante diferencia. A pesar de eso, Gaston fue poco a poco acortando el margen, volviéndose más preciso y reencontrándose con la performance del primer set. Con un trabajo desgastante, rescató la desigualdad y puso incertidumbre y muchos nervios en la pista. Al no poder capitalizar las opciones, otro desempate estaba a la vista. Con la idea de que no tenía nada por perder, y había salvado tres match points, Carballes hizo utilidad de su repertorio y se lo llevó épicamente por 7-6(9-7).
En el definitorio, el español se esforzó, luchó hasta el final y jugó un tenis de altísimo nivel. Una rotura en el segundo y otra en el sexto, le dieron finalmente un maratónico triunfo por 6-7, 7-6 y 6-1 en 3h25m.
