Emiliana Arango hizo un gran partido en Roma ante la rusa Andreeva, pero se quedó con las manos vacías. La colombiana se despidió del torneo italiano, cayendo en la segunda ronda contra la séptima sembrada del cuadro.
Arango finaliza su capítulo en la capital romana
El Foro Itálico es un lugar de ensueño para aquellas jugadoras que permiten ilusionarse con cualquier victoria. Si hablamos de ilusión, hay que mencionar a Emiliana Arango (97°), quien accedió al cuadro principal del WTA 1000 de Roma y trabajó duro para conseguir el pase a la segunda ronda. La tenista colombiana luchó por más de tres horas para doblegar a la búlgara Tomova, ganándose una cita con la número siete del mundo, Mirra Andreeva. Por su lado, la joven rusa, campeona en Indian Wells, venía de hacer un buen papel en Madrid, llegando hasta los cuartos de final, donde fue tachada por Coco Gauff. Su único enfrentamiento fue en la Qualy de Roland Garros 2023, partido que ganó Andreeva.
Andreeva destaca su buena forma
Al comienzo del partido, la rusa se afirmó en el retorno y logró desarticular a la colombiana, marcando un quiebre temprano. Luego, Mirra se estrenó en el servicio con un tenis sin fisuras, validando el break con autoridad. De todos modos, Arango no se quedó atrás con su propuesta, mostrando coraje desde el resto para doblegar a la rusa y recuperar el saque. Sin embargo, Andreeva volvió a encargarse de las riendas del juego, imprimiendo su versatilidad en el terreno para concretar otra ruptura. Después de confirmar la ventaja, la tenista de 18 años se aferró a sus condiciones, tomando control del encuentro y estableciendo un tercer break para superar a la colombiana por 6-2.
La rusa pone fin a la aventura de Arango
En el segundo set, Emiliana Arango se mostró con mayor decisión a la hora de lastimar a su oponente, lo que le permitió encontrar el juego para fracturar el servicio de la rusa. De igual manera, Mirra no se dejó llevar por la desventaja y actuó rápidamente para recuperar el saque perdido. Luego, la colombiana volvió a presentar sus virtudes en el resto, generando daño en su rival y facturando otro quiebre. Aún así, Andreeva se plantó una vez más frente a la adversidad, implantando sus habilidades para nivelar las cifras. A partir de allí, la rusa forjó un tenis sólido, firmando otra ruptura para colocarse arriba en los números y se terminó llevando el triunfo con un 6-4 final.