Opinión

¿Roger Federer no se cansa de ganar?

Federer besa su octavo trofeo en Basilea | Foto: @rogerfederer

Roger Federer y Juan Martín Del Potro protagonizaron una final propia de dos grandes campeones. Tres mangas jugadas con gran intensidad y un tenis de alta calidad. Ambos campeones dejaron todo para conseguir el título. Nosotros los espectadores estamos agradecidos por este gran espectáculo.

La final tuvo un justo ganador: Roger Federer. Fue superior durante gran parte del partido, pero claro, enfrente tuvo a un gran rival que nunca se dio por vencido, tras dos horas y 30 minutos de intenso juego se quedó con el partido y el campeonato por (6-7(5), 6-4, 6-3).

La primera manga fue directamente no apta para cardíacos. Jugado con mucha intensidad, con ambos protagonistas buscando tiros ganadores, que algunas veces se les fueron por escaso margen. El tenista local estuvo mejor, quebró en dos ocasiones y también tuvo oportunidades de romper en otros dos juegos más. El tandilense respondió a gran nivel. Tras perder su servicio en el noveno game, en el término pugilístico quedó  al borde del Knock Out. Pero jugó con gran calma, arriesgó y recuperó, para llevar la definición de la manga a muerte súbita.

En el tie break Federer tomó una rápida ventaja de (3-0) que parecía definitiva. Nada de eso, Delpo las corrió todas, pegó con más dureza aún,  ganó seis puntos seguidos y se quedó de forma casi increíble con la primera manga.

El segundo parcial fue más equilibrado. Ambos estuvieron más seguros con sus servicios y no se presentaron tantas oportunidades de quiebre como en la primera. Cuando parecía que esta manga se definiría en otra muerte súbita, un par de muy buenas  devoluciones de Federer en el décimo juego le abrieron la oportunidad de quebrar, que obviamente no dejó escapar.

El set definitivo comenzó de forma auspiciosa para Delpo. Aprovechó un par de errores de Federer para quebrarle el servicio. Pero fue apenas un espejismo. Ese gesto de Federer golpeando la red con toda su rabia, era todo un símbolo de coraje, de sed de «venganza».

Tras las dos mangas jugadas con mucha intensidad, se hizo notorio el cansancio en Delpo. El Gran Roger vio su gran oportunidad, desplegó todo su tenis ofensivo, su derecha demoledora, sus toques sutiles. Hizo que todo el esfuerzo y la voluntad de Delpo fuesen en vano. Terminó ganando con comodidad  esta tercera manga.

Un merecido triunfador, un gran campeonato, el octavo título de Basilea en sus vitrinas. Qué más podemos agregar de este gran campeón.

Sobre el autor

Tie Break

Apasionado del tenis en general, del tenis argentino, mi país natal. en particular. Me gusta seguir a los tenistas argentinos por los torneos juveniles (ITF-Junior), y los Future. Todo el Tenis que haya por TV e Internet no pasará desapercibido.

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