Tras la derrota contra Thanasi Kokkinakis el pasado sábado en Miami Roger Federer, sin muchas vueltas y muy serio, confirmó lo que se esperaba: “Ya lo he decidido, no voy a jugar ningún torneo en tierra este año”.
Así anunciaba el suizo que no disputaría ningún torneo sobre polvo de ladrillo este año, al igual que la temporada pasada después de Miami Roger decide disputar directamente la gira de hierba, la superficie donde mejores resultados obtuvo. Quizás sea una decisión muy acertada, en Indian Wells se lo veía que no estaba del todo cómodo con su juego, así y todo, iba sacando los partidos adelante simplemente por ser Federer, pero en Miami no fue el caso, y no solo que cayó en su presentación, sino que también cedió la primera plaza del ranking mundial.
¿Una decisión acertada?
Muchos nos ilusionábamos con ver a Federer jugar en Roland Garros y levantar por segunda vez el trofeo en Paris. Todo hacía pensar que este era el momento justo para intentarlo, ya que muchos de sus principales rivales no están atravesando un buen momento. Aunque esto era muy riesgoso para un jugador de edad tan avanzada, aun mas pensando que está muy cerca del inicio de Wimbledon, el principal objetivo de Roger.
Con casi 37 años y después de estar más de veinte años viajando de torneo en torneo y jugando al máximo nivel, es una correcta decisión del ganador de 20 Grand Slams desconectarse por un tiempo del tour, recargar las energías e intentar regresar con las pilas renovadas para ir en busca del noveno título en la `catedral del tenis’.

Federer buscará que este año se igual que en 2017, donde después del descanso, luego de vencer a Nadal en Miami, volvió para ganar Halle y levantar el tan anhelado octavo Wimbledon. Teniendo en cuenta lo bien que le fue la temporada pasada no era de extrañarse que el maestro suizo vuelva a tomar la misma decisión de saltearse la gira completa de tierra batida este año.
Posibles cambios en el ranking
Probablemente este era el año en que Roger podría haber hecho un intento por terminar el año como el mejor tenista de la temporada, y alcanzar así a Peter Sampras como máximo jugador en terminar el año en la cima del ranking. Por el momento lidera la Race to London con una diferencia considerable sobre Del Potro, pero el hecho de saltarse tantos torneos importantes seguramente hará que pierda esta posición de privilegio.
En cuanto a la cima del ranking es muy probable que la recupere incluso sin disputar ni un solo torneo en arcilla. Rafael Nadal si quiere conservar la primera plaza del escalafón mundial deberá defender 4680 puntos, misión que parece muy complicada, aunque hablando de Rafa y polvo de ladrillo nada es imposible. De todas formas, el mismo Roger dijo que el número uno no era su principal objetivo, sino mantenerse sano y seguir ganando títulos importantes.
Muy bueno el comentario.Certero y meduloso.
Muy interesante el artículo.